A la hora de cambiar la marca de pienso de nuestro perro hay que tener una serie de precauciones para no provocar síntomas digestivos no deseados como vómitos o diarrea. Para evitar que esto suceda, y pueda cambiar con exito la marca de pienso, es necesario crear una transición adecuada entre los dos piensos.
¿En qué consiste la transición?
La transición es el proceso de cambiar gradualmente la dieta de un perro de una marca de pienso a otra. Esto se hace para evitar problemas digestivos y asegurar que el perro recibe una dieta adecuada y equilibrada.
La transición se realiza mezclando la nueva marca de pienso con la marca actual en una proporción determinada que recomendamos para el cambio y ajustando gradualmente la cantidad de cada marca hasta que el perro esté comiendo solo la nueva marca, tiempos indicados más abajo. Es importante seguir las instrucciones del fabricante en cuanto a la cantidad de pienso que se debe dar al perro durante el proceso de transición y asegurarse de que el perro tenga acceso a suficiente agua fresca y limpia para beber.
Durante el proceso de transición, es importante observar al perro de cerca para detectar cualquier cambio en su comportamiento o apariencia, como diarrea o vómitos, y consultar a un veterinario si es necesario. Una vez que el perro esté comiendo solo la nueva marca de pienso, es importante mantener la consistencia en su dieta para evitar problemas digestivos.
¿Cómo debo hacer la transición?
Para no tener estos problemas digestivos al cambiar de pienso de perro, lo ideal es seguir estos pasos:
- Día 1-2: 25% pienso nuevo y 75% pienso anterior.
- Día 3-4: 50% de cada pienso.
- Día 5-6: 75% del pienso nuevo y 25% del pienso anterior.
- Día 7 en adelante: 100% del pienso nuevo.
Alternativas para la Alimentación
En ocasiones nuestro perro puede no aceptar este cambio y rechazar este nuevo y extraño alimento. Para ayudarlo a aceptar el nuevo pienso, podemos usar algunos trucos:
- Seguir un horario de comida: Si nuestro perro suele tener comida disponible todo el tiempo y no conseguimos que acepte el cambio, es el momento de fijar una hora para comer. El nuevo alimento se le ofrece por un corto tiempo, si no lo come durante este tiempo, se le quita (repetir varias veces al día). De esta forma intentaremos que el animal coma el nuevo alimento en un horario determinado.
- Ingrediente extra: si nuestra mascota continúa rechazando el nuevo pienso puede ser útil añadir algún ingrediente extra y mezclar con el nuevo alimento para animarlo a comer. En la mayoría de los casos con una pequeña cantidad de ese alimento será necesario.
- Cambiar la textura: Podemos sugerir también cambiar la textura del nuevo pienso vertiendo algo de agua caliente y reblandeciéndolo un poco.
